Por cuatro perras – Marea
Lo que le sabe a humo a mí me sabe a tierra y aunque mis gruñíos los vendí por cuatro perras, me queda un poco de tinta para emborronar.
Y apagar las colillas en todos los recuerdos, que fueron semilla pero ahora son crisantemos, que esperan que envuelto en madera los vaya a besar.